Parece evidente que los cuidados enfermeros tienen un impacto directo en la evolución y salud de los pacientes que cuidamos en el medio hospitalario, pero relativamente pocas veces una intervención enfermera demuestra científicamente un impacto tan importante como el que se desprende del Estudio QASC.
En dicho proyecto se estandarizaba el control de tres variables influyentes en el desarrollo asistencial de los pacientes con ictus que son:
El objetivo del proyecto es establecer una estandarización a nivel mundial para equiparar dichos cuidados a lo largo de todos los hospitales del mundo.
La hiperglucemia, la disfunción de la deglución y la temperatura elevada son variables fisiológicas que se sabe que se asocian con peores resultados del ictus.
El tratamiento óptimo de la fiebre, la hiperglucemia y la disfagia se ha identificado en las directrices internacionales como prioridades para el tratamiento de los accidentes cerebrovasculares en los pacientes hospitalizados.
El ensayo Quality in Acute Stroke Care (QASC) demostró que las intervenciones multidisciplinares dirigidas por enfermeras para el tratamiento de la fiebre, la hiperglucemia y las dificultades de deglución tras un ictus agudo mejoraban significativamente los resultados sanitarios.
Los resultados mostraron que la aplicación respaldada de los protocolos clínicos Fever, Sugar, Swallow (FeSS) dio lugar a una disminución del 16% de la muerte y la dependencia a los 90 días, de una parte.
Por otra parte, los resultados apreciados durante la estancia hospitalaria del tratamiento de estas variables fueron los siguientes:
La implementación del protocolo FeSS, es una herramienta que se dirige plenamente por parte de enfermería y permite estandarizar los cuidados de los pacientes hospitalizados en las Unidades de Neurología y Unidades de Ictus. Puede parecer que dicha herramienta es redundante en unidades de hospitalización altamente tecnificadas de hospitales referentes de tercer nivel, pero lo cierto es que la base de los cuidados enfermeros, a veces, parece pasar a segundo plano en medio de tanta tecnificación.
Jesús B. Gutiérrez Martín, enfermero en la Unidad de Ictus del Institut Clínic Neurociéncies (ICN). Hospital Clínic de Barcelona y tutor de módulo del Máster en Cuidados Enfermeros al Paciente Hospitalizado de IL3-UB, nos cuenta que en el hospital donde dirigió la implementación de dicho protocolo, aun siendo referente a nivel nacional en el tratamiento y cuidado de Ictus, tenía un claro campo de mejora en algo tan aparentemente sencillo como el control, seguimiento y tratamiento precoz de la temperatura, deglución y glicemia.
En el ámbito sanitario la realización de estudios científicos es un hecho habitual, cada día cientos de investigadores realizan dichos estudios para implementar mejoras en el cuidado de las personas o en los procesos de curación de éstas.
Cuando los estudios científicos son en base a un medicamento o una técnica terapéutica, la implementación de este cambio es mucho más vertical, que en los estudios científicos enfermeros, donde la implementación de cambios en los cuidados enfermeros implica un mayor número de trabajadores y una mayor dificultad en el registro de los cambios obtenidos.
Por lo anterior, y como parte natural de los procesos de implementación de nuevas medidas en los ámbitos, nos encontramos con una resistencia al cambio por parte del personal que tenía que llevar a cabo la implementación de dicho protocolo, que se tuvo que manejar por parte de los investigadores, así como por parte de los mandos y referentes asistenciales.
Tras unas sesiones formativas, la elaboración de soportes visuales y la coordinación de los equipos médicos y enfermeros, se elaboró un plan de implementación del Protocolo FeSS que había de llevar sin duda a la mejora de la calidad de los cuidados de los pacientes ingresados en nuestra unidad.
Es evidente que es necesaria la estandarización de la gestión del cambio en las organizaciones, en base a modelos contrastados y mediante proyectos organizados, para asegurar en la medida de lo posible, el éxito de las medidas a implementar que deben generar los cambios esperados. Con medidas como la expuesta, podemos evidenciar la importancia de los cuidados de enfermería en la salud de los pacientes y como medidas aparentemente sencillas tienen un impacto importantísimo, teniendo como protagonistas a los pacientes y como mediadores al personal de enfermería.
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