CaixaBank

A inicios de 2015, CaixaBank presentó su Plan Estratégico 2015-2018 cuyo principal objetivo es“alcanzar el liderazgo en calidad, confianza y reputación con el foco de atención puesto en el cliente” y donde situaba al equipo humano como elemento estratégico de su crecimiento. En este plan, la figura del formador interno está llamada a tener un papel crucial:

• El mercado financiero local se ha convertido en una plaza altamente competitiva, con clientes cada vez más informados y cautos lo que demandaba perfeccionar las habilidades y el conocimiento de los profesionales del banco, y por tanto, de los formadores que estaban en contacto con ellos.
• La evolución tecnológica a la que está sometida el mercado provoca, además, un cambio profundo los hábitos de consumo. El formador interno debía ser clave en la detección de nuevas tendencias y fenómenos que afectan al consumidor. 

Con un nivel de compromiso y dedicación incuestionables, además de un profundo conocimiento de la institución y su oferta, el banco quería impulsar una mayor eficiencia de la labor del al equipo de formadores internos.

• Pese a tener numerosas herramientas digitales a su disposición, el equipo de formadores internos no estaba sacando el máximo partido a la tecnología para diseñar acciones formativas más atractivas. La brecha digital amenazaba con restar efectividad a sus acciones.
• El equipo de formadores internos contaba, además, con un nivel dispar de especialización digital, estaba territorialmente disperso, era heterogéneo en cuanto perfiles o edad, y su inquietud por explorar nuevas tendencias y fenómenos ligados a la nueva economía del conocimiento se encontraba en un punto inicial.  

Con el objetivo de hacer más efectiva la aproximación a sus compañeros, CaixaBank y el Instituto de Formación Continua de la Universidad de Barcelona, diseñaron un “Programa de Habilidades Digitales” en modalidad online dirigido al equipo de 1.500 formadores internos.

• El programa se estructuró como un itinerario de talleres eminentemente prácticos capaces de proporcionar a los formadores un marco de reflexión sobre sus metodologías didácticas y el impacto que tiene la irrupción de los recursos TIC en su trabajo y en sus mercados.
• Los talleres se diseñaron para promover una mayor comprensión de los conocimientos; su correcta aplicación; el análisis, síntesis y discusión de los mismos, y la colaboración y experimentación en torno al aprendizaje adquirido.
• Se trata de un programa tutorizado, que acompaña a los formadores para mejorar la efectividad  trabajo y que les abre la mente en relación a las nuevas tendencias digitales y hacia donde avanza el mundo. 

• Además de un alto nivel de compromiso y profundo conocimiento de los procesos, productos y servicios de CaixaBank, hoy los formadores internos cuentan con nuevas competencias digitales para aproximarse de manera más efectiva a sus compañeros, y lo que es más importante, despertar en ellos la inquietud de estar al día de un mercado que cambia cada vez más rápido.
• Junto con reducir la brecha digital de los trabajadores del banco, el programa ha sido decisivo en el impulso de la iniciativa de sus profesionales, los que proactivamente hacen nuevas propuestas de componente tecnológico para mejorar la comercialización de los productos y servicios que tiene la entidad.
• Que el equipo de formadores internos esté alineado con la estrategia de uso intensivo de la tecnología de CaixaBank está siendo clave para garantizar un flujo de conocimiento constante en el interior de la organización.